Sábado Santo de la Sepultura del Señor
Durante el Sábado Santo la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor, meditando su pasión y muerte, su descenso a los infiernos, y se abstiene absolutamente del sacrificio de la misa, quedando desnudo el altar hasta que, después de la solemne Vigilia o expectación nocturna de la resurrección, se inauguren los gozos de la Pascua, con cuya exuberancia iniciarán los cincuenta días pascuales.
Fuente: Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo (https://ocarm.org/es/)